Luis Humberto Silva junto a los trabajadores más longevos de la industria Odeón

Fuente: Archivo personal residentes Conjuntos Habitacionales Odeón

 

La familia Silva Pantoja llegó a vivir a una de las últimas casas construidas en el pasaje de Vicuña Rozas, allí comenzaron un periodo de sus vidas muy significativo, que incluso hasta el día de hoy genera un sentido de pertenencia e identidad vinculado a la historia de la Odeón, de los conjuntos habitacionales y de su propio paso por Quinta Normal. Luis Silva hijo logró también llegar a vivir a una de las últimas casas confeccionadas en el conjunto habitacional pero por la calle Andes, hasta el día de hoy todavía vive en este pasaje siendo un heredero del legado de su padre y su familia en esta industria discográfica. Las casas comparten la misma dirección para todo el pasaje y se diferencian con letras del abecedario.

 

Luis Silva hijo, Juan Araneda y otros trabajadores de la industria Odeón

Fuente: Archivo personal residentes Conjuntos Habitacionales Odeón

 

En el mundo laboral de Odeón, las mujeres cumplían una importante misión en el modo de producción, realizando labores específicas dentro del proceso de confección de los discos, en donde algunas de las labores realizadas eran de creación de fundas, envasado, enfundado, limpieza de discos y secretariado. Algunas de las trabajadoras de la industria fueron Elia Aliaga, encargada de la unidad, María Reyes, Lucía Rojas, María González, entre otras mujeres que trabajaban en las distintas secciones de la industria, quienes se pueden apreciar a continuación. 

Mujeres trabajadoras de la industria Odeón

Fuente: Archivo personal residentes Conjuntos Habitacionales Odeón

 

Otra historia femenina de importancia de relevar, es aquella que vincula a las familias de Odeón, con la almacenera que se ubicaba al costado de la empresa y que finalmente se convirtió para la comunidad en alguien muy importante en la vida cotidiana de la industria, en la calle Libertad se encontraba el almacén de Carlita, quien junto a su hermana atendían este negocio muy recordado por los trabajadores e incluso sus familias en la actualidad.

 

Carlita junto a su hermana con el matrimonio de Luis Humberto Silva y Luzmila Pantoja en la vivienda del pasaje Odeón Vicuña Rozas

Fuente: Archivo personal residentes Conjuntos Habitacionales Odeón

EL IMPACTO DE BANDAS Y MÚSICOS

Si es necesario hablar sobre una de las memorias más significativas para la historia de estos conjuntos habitacionales, es el recuerdo de quienes habitan estas viviendas sobre el trabajo de creación de los discos de acetato y vinilo, el hecho de producir y difundir la música por nuestro país ha quedado como un legado imborrable para estos vecinos de Quinta Normal. Al momento de preguntar sobre cuál músico o banda ha sido la más importante para estos trabajadores, son indudablemente Los Beatles quienes rompieron todos los paradigmas de la producción discográfica, gracias a ellos Odeón creció productivamente en Chile y el mundo y también debido a ellos, los trabajadores de la industria pudieron tener mucho más trabajo. Dicen algunos vecinos: “Los Beatles me dieron trabajo”. 

“De todos los artistas que la Odeón trabajó y grabó, sin duda Los Beatles han sido los que con mayor fuerza produjeron trabajo y horas extras en la Odeón, debían realizar turnos de noche ante tanta demanda que existió gracias a Los Beatles” (Entrevista personal, 2024).

 

Disco de vinilo Abbey Road de Los Beatles producido por industria Odeón Chile

Fuente: Archivo personal residentes Conjuntos Habitacionales Odeón

 

Sin duda Los Beatles revolucionaron la música mundial y en general la industria discográfica, gracias a estos discos el trabajo de quienes hoy recuerdan su vida industrial desde Quinta Normal, significó para ellos un aporte cultural circunstancial para el desarrollo de la música como la conocemos hoy. En general este momento significó mayor trabajo, mayores ingresos y quizás el mejor pasar de todos los trabajadores de esta industria en la historia de la Odeón, marcó la historia universal y también la historia de Chile, su cultura y sus trabajadores. 

Un caso especial reiterado por diversos vecinos de estos pasajes estaba vinculado con el artista Cat Stevens, quien se visualizaba como un nuevo gran artista que permitiría fomentar la producción y las ventas, por lo que la empresa apostó por esta nueva figura anglo y produjo una gran cantidad de discos que finalmente no se vendieron, recuerdan muchas personas que los discos terminaron arrumbados en dependencias de la Odeón sin lograr salir a venta pues no se logró la demanda esperada. Al contrario, otro gran artista de habla hispana que la Odeón decidió no invertir en él para dedicarle toda la inversión a Cat Stevens, vendía y vendía discos en Chile: Julio Iglesias.  

 

Disco de Cat Stevens Another Saturday Night producido por Odeón Chile

 

Fuente: https://www.discogs.com/es/release/25647463-Cat-Stevens-Another-Saturday-Night

 

Sin duda también el tango, como una de las músicas más importantes del continente, causó grandes momentos laborales y emocionales en Odeón, además de Carlos Gardel, que vendió miles de copias en Chile producidas desde Odeón, otros tangueros importantes muy producidos fueron Alfredo de Angelis, Julio Sosa o Argentino Ledesma. 

“También se lanzaron muchos discos de tango, entre ellos Carlos Gardel, Alfredo de Angelis, el tanguero favorito de los papás de Roxana era Julio Sosa “el varón del tango”. Cuando había fiesta acá en la casa, corríamos las mesas y mis papás bailaban en el living de su casa, cuando había fiesta todos les pedían que bailaran, bailaban muy bien el tango” (Entrevista personal, 2024). 

En gran parte, la llegada tanto de la Nueva Ola como de la música tropical a las diversas casas del país en la década de 1950 y 1960, se debió al trabajo de la Odeón, nuevos cantantes locales, influenciados por los ritmos y las estéticas tanto estadounidense como caribeñas, vinculándose directamente con un modo de trabajo industrial nunca antes visto en la historia cultural del país, provocaron una suerte de boom musical de masas, apareciendo cantantes como el Pollo Fuentes, Cecilia, Los Ramblers, todos ellos al alero de Lucho Gatica, quien había logrado hacerse un nombre a nivel internacional durante la década de 1950 posicionado al bolero incluso sobre el tango como música cotidiana, habiéndose iniciado en la música al grabar sus primeras canciones en Odeón. Lucho Gatica visitó en varias ocasiones la industria Odeón para grabar nuevos discos que hicieron aún más grande su obra artística, en la misma industria ubicada en Libertad la empresa tenía un estudio de grabación, hasta allá fue alguna vez Lucho Gatica y se fotografió con los trabajadores de la sección imprenta. Esta fotografía es guardada como un tesoro por la familia López, el padre de la familia aparecía en la fotografía junto a Lucho Gatica.

 

Lucho Gatica junto a los trabajadores de la sección imprenta de Odeón Chile

Fuente: Archivo personal residentes Conjuntos Habitacionales Odeón

 

Otro momento importante para la actividad productiva de la industria, ocurrió después del Mundial de Fútbol masculino de 1962 organizado en Chile, el gran impacto que la canción el “Rock del Mundial”, canción compuesta por la banda chilena Los Ramblers -primera canción que musicalizó un Mundial de Fútbol en la historia del certamen-, generó que, aunque el single del “Rock del Mundial” y su primer álbum del mismo año 1962 se lanzaran con otros sellos discográfico, la EMI Odeón buscara a Los Ramblers para trabajar todos sus próximos discos que componen su gran obra musical, generando uno de los momentos de producción masiva en torno a la música chilena más importantes de la historia del país.

 

Disco de Los Ramblers Ramblering producida por Odeón Chile

Fuente: https://www.discogs.com/release/14824197-The-Ramblers-Ramblering-Sin-Decir-Adios/image/SW1hZ2U6NDQ2MTc3NTQ=

En la década de 1960 y principalmente por una importante influencia proveniente desde Cuba, comienza a entrar hasta Chile las nuevas músicas bailes tropicales de la mano principalmente de la Orquesta Matancera, agrupación que tocando la diversidad musical del siglo XX cubano, entre ellas el son, el danzón, el mambo y el chachachá, salió de la isla en la década de 1960 difundiendo su gran obra bailable cuya data comienza en 1920. Este hito nuevamente marcó la historia de la producción discográfica de Chile, pues gracias a estas influencias caribeñas comenzaron a nacer diversas orquestas tales como La Cubanacán, Ritmo y Juventud o la Orquesta Huambaly, esta última generó gran parte de su producción con la Odeón, aportando en la producción masiva de discos para las fiestas bailables en Chile.   

A las familias de los trabajadores la industria Odeón le regalaba dos discos al año, uno para Fiestas Patrias y otro para las Fiestas de Fin de Año, quienes habitan los conjuntos habitacionales de esta industria discográfica. El momento de entrega de esos discos fue muy importante, pues significaba mucho para las familias poder disfrutar de las fiestas con los mejores sonidos bailables del momento, era algo sumamente valioso. Además, muchos trabajadores, principalmente hombres, elegían los discos de los cantantes favoritos de sus señoras y se los regalaban como un gesto amoroso. Pero este beneficio venía de la mano con un gran esfuerzo laboral, las fechas anteriores a las fiestas eran las que concentraban la mayor parte del trabajo, un alto nivel de producción venía de la mano con un sacrificio físico significativo. 

“Pasaba para fiestas patrias y Navidad que se vendía cualquier cantidad de música, entonces había que producir, producir, producir. Entonces, no sé cómo dominan tanto el cuerpo y no iban al baño en horas, que cuando ellos terminan hacían una muestra, la tenían que mandar a control de calidad y ahí el control de calidad lo miraban con telescopio. Alguna cuestión así y lo escuchaban entonces para ver si había algún problema que se saltaba el surco o estaba una ralladura. Entonces si había un problema, ahí le iban a avisar que tenía que cambiar el lado A o el lado B. Entonces uno tenía que ir a la bodega, donde están las matrices. Ahí necesito tal cosa. A veces pasaba el problema que no había repuesto, o sea, habían hecho tira, así que tenían que mandar a galvanoplastia a que hicieran otra matriz. Otras veces había de repuesto, entonces todo ese tiempo perdido tenía una un pago, pero uno que quería estar ahí prensando, prensando ahí donde se ganaba” (Entrevista personal, 2023).

 

Trabajadores Odeón en paseo del sindicato

Fuente: Archivo personal residentes Conjuntos Habitacionales Odeón

 

Don Renato Martínez fue presidente del sindicato de Obreros de la Industria Odeón durante 17 años, de acuerdo a sus propias memorias, logró dar avances significativos en las condiciones laborales en que los trabajadores de la Odeón generaron, entre ello para Fiestas Patrias y Fiestas de Fin de Año los trabajadores de la industria recibían una gratificación correspondiente a un mes adicional de pago para estas celebridades e incluso medio mes para las vacaciones de los trabajadores. Además de este hito, Renato Martínez como presidente del sindicato logró la apertura de una Sala Cuna para las mujeres que se veían obligadas a ir al trabajo con sus hijos, que los trabajadores pudieran ser indemnizados por años de servicio sin tope, que las casas fueran expropiadas de la industria y pasaran a manos de los trabajadores, entre otros beneficios y logros. 

De hecho las casas entregadas a los trabajadores Odeón, fueron pensadas para que estos pudieran arrendarlas siendo dueña de estas viviendas la misma empresa. Como se mencionó anteriormente el primer conjunto de Lope de Ulloa era más bien un conjunto de viviendas pequeñas y poco espaciosas, de dos habitaciones, pensando –tal cómo reflexionan los vecinos- en que pudieran controlar de esta forma la natalidad entre los trabajadores de la empresa. Las viviendas construidas por Vicuña Rozas y Andes por su parte fueron pensadas con más habitaciones y con espacios más grandes que permitieran a las familias pensar en tener más hijos. Al respecto, cabe mencionar que las recepciones finales de los conjuntos habitacionales Odeón se consiguieron el año 1959 para el de Lope de Ulloa, 1962 el de Vicuña Rozas y 1967 el de Andes.

Se cuenta que sin previo aviso, ante la visita de los dueños de la EMI-Odeón de origen inglés a las dependencias de la industria en su sucursal chilena, estos eran llevados a visitar las viviendas consideradas como uno de los principales desarrollos laborales de la empresa en Sudamérica, como Chile poseía una fuerte legislación respecto de la creación de la Caja de la Habitación Popular y sus vínculos con la empresa privada, para los dueños ingleses la construcción de viviendas para sus trabajadores en el contexto de un programa de vínculos entre dueños y trabajadores, era algo muy importante para su proceso de globalización de los principios capitalistas tradicionales.

 

Mariela Silva en vivienda Odeón Vicuña Rozas

Fuente: Archivo personal residentes Conjuntos Habitacionales Odeón

 

Estas visitas generaban emociones encontradas entre quienes vivían en estas casas, por una parte, causaban la emoción por la curiosidad de conocer a estos ingleses y entender la importancia de la Odeón a nivel mundial, pero también, les generaban una cruda vuelta a la realidad: estas hermosas casas eran propiedad de la industria y no de ellos y que ante cualquier vaivén, disgusto o necesidad empresarial, podían perder lo tanto que habían construido en ellas. Sin duda alguna, la construcción de estas viviendas y el habitar estos tres lugares de Quinta Normal, potenció el vínculo social, cultural y familiar entre los trabajadores, además, complementando con el fortalecimiento del sindicalismo en la industria Odeón y también en general a lo largo de Chile, por ello estos trabajadores que laboraban juntos, que vivían juntos, que se organizaban juntos, comenzaron incluso a vacacionar juntos. 

“Habían muchos paseos, por ejemplo en las vacaciones se iban en una micro Cerrillos-Villa Olímpica que arrendaban, hasta Tacna llegaron una vez u otra vez también fueron hasta Chiloé. Existía mucho compañerismo, mucha solidaridad entre la gente de la Odeón y de los pasajes Odeón, eran compañeros, también eran vecinos, amigos y familia. Algunos jefes viajaban con terno, eran muy parcos, pero conmigo eran todos cercanos y cariñosos. Hacían ollas comunes para comer todos en las vacaciones, freían papas, cebollas, todos comíamos juntos. Nos íbamos 10 días para el norte y luego 10 días para el sur” (Entrevista personal, 2024).

 

Trabajadores de Odeón en pase de vacaciones

Fuente: Archivo personal residentes Conjuntos Habitacionales Odeón

 

Los trabajadores fueron entonces creando una cultura obrera que traspasaba el vínculo simplemente laboral, también fueron construyendo un modo de ser que potenció otros elementos propios del siglo XX fabril, entre ellos por ejemplo, el vínculo familiar y la solidaridad entre trabajadores aportó, entre otras cosas, a la creación de clubes deportivos y el desarrollo de una cultura festiva muy extensiva entre todas los estamentos de la industria.

 

Equipo de fútbol de la industria Odeón

Fuente: Archivo personal residentes Conjuntos Habitacionales Odeón

 

Entrega de discos conmemorativos para trabajadores de la Industria Odeón

Fuente: Archivo personal residentes Conjuntos Habitacionales Odeón

 

Poco a poco esta solidaridad fue llevando a uno de los momentos más importantes de la historia de estas poblaciones: la posibilidad de adquirir las casas construidas por la industria Odeón. Así, desde un gran trabajo organizativo y una lucha sindical de años, alentados con la elección del presidente Salvador Allende en 1970 y la llegada de la Unidad Popular, el avance de las luchas históricas de los trabajadores se instaló con mayor fuerza en Chile. Muchas personas entonces comenzaron a realizar el proceso de expropiación de las casas a la industria a través de la Ley Nº 7.600 (conocida popularmente como Ley del 5%) que entregó más facultades para quienes siendo arrendatarios o que vivían en las viviendas como comodato puedan adquirir las casas desde las empresas a partir de un proceso de expropiación y luego venta a los trabajadores que vivían allí. Algunas personas de manera personal y otras de manera colectiva fueron hasta el Ministerio de Vivienda a realizar sus trámites con tal de expropiar las casas y convertirse en los dueños de las mismas. Muchas familias se encontraban en ese proceso cuando vino el Golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973, instalado así un miedo transversal, ya que era probable que la Dictadura instalada no respetaría las disposiciones de estas leyes de vivienda y todas estas luchas terminarían de manera inconclusa en esa época. 

Planimetría conjunto habitacional Lope de Ulloa y planimetría conjunto habitacional Vicuña Rozas y Andes de Violeta Parra

 

Fuente: SECPLAN, Municipalidad de Quinta Normal, 2023

 

Con ese miedo instalado, varios trabajadores de estas poblaciones fueron perseguidos por su militancia o protagonismo sindical al interior de la industria Odeón, varios testimonios señalan de la captura y tortura de estos trabajadores, para luego vivir procesos de exilio. 

“Y el vecino que en un comienzo vivía en el pasaje de Vicuña Rozas y luego en Andes fue llevado preso, quizás algún otro vecino lo acusó (…) fue llevado preso, torturado y luego se fue al exilio a Canadá, parte de su familia aún vive allá. Como participaban del sindicato, muchos vecinos fueron perseguidos. Fue muy difícil ver eso, pues todos eran como familia y fue terrible ver cómo se llevaban a la gente” (Entrevista personal, 2024).

Algunos testimonios profundizan respecto de cómo diversos allanamientos fueron realizados al interior de estos pasajes Odeón, hasta el día de hoy esa memoria que generó fragmentos, desconfianza y miedo, aún está presente en las generaciones protagonistas de estos momentos y también entre quienes heredaron estas historias y sentimientos.

“Una vez llegaron a allanar las viviendas del pasaje y un militar se encaramó por la pandereta y mi papá fue a ver y salió con el perro y el militar le dijo éntrate o los mato a los dos. Así que tuvieron que entrar y refugiarse en la pieza con todos nosotros agachados durante toda la noche. Por suerte mi papá había renunciado hace poco más de unos meses al sindicato, así que no le hicieron nada” (Entrevista personal, 2024).

Luego en la década de 1990 algunas de las personas exiliadas retornaron al pasaje Odeón a reencontrarse con la vida que habían dejado antes de 1973, todo estaba cambiado y para ellos fue un momento de sus vidas tan violento y terrible que provocó una incompletitud tan profunda, que ya el estar en estas tierras no significó nunca más lo mismo. Durante la dictadura, la ley del 5% no fue derogada y a pesar que los sindicatos fueron perseguidos, cuenta don Renato Martínez que en el caso de los sindicatos de Odeón estos volvieron a entrar en funcionamiento luego que la Organización Internacional del Trabajo (OIT) hiciera una reclamación oficial contra las políticas antisindicales que en Chile se habían instalado. 

“Y lo que por eso digo, yo no sé, buena suerte en la vida o no sé. Como a las dos semanas siguiente vino un anuncio por la televisión de que se tenían que renovar, fue un día sábado en la noche, era Vasco Costa, creo que era el Ministro del Trabajo que tenía el Pinochet, porque la OIT, la Organización Internacional del Trabajo había establecido que lo que estaba pasando en Chile sin la renovación de los sindicatos, prohibirles a los trabajadores portuarios descargar cualquier mercadería o producto que sea de barco chileno. Se acuerda que estuvieron regalando uva una vez porque no pudieron descargarla y los Chicago Boys era todo de importaciones. Llegué y decía en el día sábado en la noche anunciar que el día lunes se iban a renovar todas las directivas y en la cual todos los trabajadores podían ser elegidos. Todos los trabajadores podían elegir, eso sí, a 3 personas como dirigente de los sindicato” (Entrevista personal, 2023).

Sección imprenta industria Odeón

Fuente: Archivo personal residentes Conjuntos Habitacionales Odeón

 

Este ímpetu organizativo hizo que al menos gran parte de los trámites para lograr la expropiación de las casas de la Industria Odeón fuera realizada por Renato Martínez, quien a finales de la década de 1970 y debido a la crisis de los discos de vinilo con la entrada al mercado del casete, fue también víctima de la reducción de personal que la empresa realizó, pero al tener el fuero sindical pudo cambiar de trabajo y la empresa se vio obligada a colocarlo como empleado. Una vez ingresó a su nuevo puesto, inmediatamente pidió la solicitud para ingresar al sindicato, ya que el ingreso de los empleados al sindicato era un acto voluntario, en cambio el ingreso de los obreros al sindicato era obligatorio.

“Lo primero que nos afectó a la empresa fue el CD, el casete fue lo primero, el disco empezó a perder importancia, todos andaban con las radios. Y chita, hubo una cortadera grande, porque se dejó de prensar discos, porque qué es lo que pasó. La Feria del disco, esa que está ahí en Ahumada. Nos dijo a nosotros que traería directamente de Estados Unidos los casetes y los CD, porque habían llegado los Chicago Boys con la ley de Libre de Comercio, entonces le salía más barato comprarlo directamente en Estados Unidos. 

Entonces se acabó la fabricación de discos. Y también pa fuera varias personas. Yo me salvé porque era presidente del sindicato. ¡Oye Martínez! A ti en verdad no te veo como obrero tú debieras ser empleado. Entonces, para mí no tenía ningún sentido. Entonces realmente pensé, si paso a ser empleado tengo que renunciar al sindicato obrero. Y a renunciar al sindicato obrero pierdo la protección que un dirigente del sindicato tiene, no lo pueden despedir porque está amparado por la ley. Llega y le dije bueno, ya sí quiere tanto de hacerme un empleado, primero me voy a asegurar si es que no me va a querer para despedirme, entonces voy a asegurarme de que tenga un buen sueldo. Entonces, si yo tengo un buen sueldo, si me despiden, pero voy a sacar una buena indemnización, entonces ahí empezamos, entonces llega y me dijo, yo te paso empleado, pero no hay tanta diferencia. Entonces  no saco nada con llegar a la casa y decirle a mi señora, mira, ahora soy empleado, pero estoy ganando menos. Entonces ahí empezamos a pelearle.

Presenté mi solicitud para entrar al sindicato de empleados. Que me acogiera porque los sindicatos habían quedado suspendida las elecciones por 5 años, ya no había renovación de directorio y cosas así por los milicos, por Pinochet. Entonces llega y de repente un día el secretario del sindicato de empleados me dice, oiga Martínez, por unanimidad fue aceptado en el sindicato de empleados, así que para la próxima reunión puede presentarse” (Entrevista personal, 2023).

 

Don Renato Martínez dirigiéndose a sus vecinos en actividad en Conjunto Habitacional Odeón. 2024

Fuente: SECPLAN, Municipalidad de Quinta Normal, 2023

Si en el sindicato de obreros Renato Martínez fue presidente durante 17 años, sería presidente del sindicato de empleados durante 20 años, constituyendo él como uno de los principales protagonistas del sindicalismo al interior de la industria Odeón de toda la historia. Entonces esta experiencia organizativa lo llevó también a aportar en el proceso de expropiación de las viviendas en los pasajes Odeón, pues también como él señalaba: 

“Entonces yo, como era el presidente del sindicato, me voy a hacer cargo de estas cuatro casas. Ir a la CORVI a la corporación de la vivienda a casi todos los meses cada 15 días a catetear qué es lo que pasa aquí allá. Uno de los abogados de la CORVI de repente abre un cajón, entonces siempre me sale este problema con ustedes, me dijo, tienen algo que de repente saco una carpeta cuatro viviendas, pero hay otra carpeta como con 17 casas, porque claro son 8, 11 más las de Lope de Ulloa. 

Entonces llega, me encuentro con una carpeta de 18 personas y otra de cuatro. Son lo mismo porque dice empresa Odeón. Entonces le digo que es lo mismo, pero es que y por qué no se juntan todos. Le dije yo para no ser imprudente, prefiero consultarlo. Así que un día llamé a una reunión general de todas las que están solicitando. Entonces después de yo hacerme estas cuatro casas, me tuve que hacerme cargo de todo, porque ya conozco todo el manejo, casi me sacaron en los hombros para fuera del pasaje porque yo me hacía cargo sin pedirle nada” (Entrevista personal, 2023).

Plano viviendas y conjuntos habitacionales Odeón Vicuña Rozas y Andes

Fuente: SECPLAN, Municipalidad de Quinta Normal, 2023

 

El traspaso del total de las viviendas a manos de la institución habitacional del momento, SERVIU, ocurrió durante la década de 1980 e incluso algunas casas terminaron su proceso recién en la década de 1990, hasta ese momento incluso cuando la EMI-Odeón continuaba funcionando adaptándose a los cambios que trajo la instalación del casete y del CD, las personas habitantes de estas viviendas lograban finalmente ser propietarios de sus casas. 

En la década de 1980 otra banda que apareció y que causó curiosidad entre los trabajadores de Odeón fueron Los Prisioneros, la mayor parte de la obra fue producida por esta empresa discográfica, este auge de la nueva generación musical de 1980 liderada por Los Prisioneros, generó que a pesar de los cambios en el formato musical, la empresa EMI-Odeón volvió a realizar una producción masiva de casetes, en plena época de lucha contra la Dictadura, la masificación de Los Prisioneros provocó que los vecinos de Quinta Normal trabajadores de Odeón nuevamente tuvieran un gran momento de trabajo y producción. El casete “Corazones” se posicionó como el segundo álbum chileno más vendido en la historia de nuestro país. 

 

Portada casete Corazones de Los Prisioneros producido por EMI-Odeón Chile. 1990

Fuente: https://www.adnradio.cl/novedades/2020/05/20/fotografo-de-la-portada-del-corazones-y-la-figura-de-jorge-gonzalez-me-hubiese-encantado-que-apareciera-por-lo-menos-su-menton-o-boca-es-algo-de-lo-que-siempre-me-arrepiento.html 

Una parte importante de la historia musical chilena vive aún en estos conjuntos habitacionales de la comuna de Quinta Normal, la producción de discos, casetes y hasta CD, aún es recordada por las personas que trabajando en esta fábrica, cuentan sobre sus antiguos momentos trabajando en la industria musical más grande de la historia de nuestro país. Durante la década de 1980 el declive fue inevitable, la reducción de personal muy significativa y aunque en la década de 1990 la producción en una menor escala continúo, definitivamente la historia de la producción nacional de música finalizó al cesar el funcionamiento de la EMI-Odeón en su antigua fábrica de la calle Libertad, terminando así parte de nuestra historia cultural. Hoy son los conjuntos habitacionales Odeón de la comuna de Quinta Normal los que podrían denominarse como los últimos legados de la gran historia cultural de la producción musical chilena. Aún estas familias mantienen viva esta impresionante historia de industrias, trabajo y música. 


Trabajadores Odeón en conmemoración de los 40 años de la industria

Fuente: Archivo personal residentes Conjuntos Habitacionales Odeón

 

Familias de los Conjuntos Habitacionales Odeón. 2024

Fuente: SECPLAN, Municipalidad de Quinta Normal, 2024

 

BIBLIOGRAFÍA